Existen muchos Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) que afectan a miles de personas, generalmente a las mujeres. No aceptar tu cuerpo y querer cambiarlo de una manera radical es la causa principal para desarrollar uno de estos, pero la solución no es esa. Sentirse culpable por sufrir episodios de atracones de comida es la característica principal de la Bulimia nerviosa. Si quieres saber más, te lo explicamos todo en el siguiente artículo.
Bulimia nerviosa: atracones de culpabilidad

¿Qué es la bulimia nerviosa?
La bulimia nerviosa es un trastorno alimenticio que genera episodios en los que la persona ingiere una gran cantidad de comida, utilizando más tarde métodos de ‘desintoxicación’ de esas calorías. Generalmente suele ser comida basura, alimentos que no todos los días comemos por su alto contenido calórico y que te hacen perder el control. Como consecuencia, surge un sentimiento de culpa que deriva en métodos para no subir de peso, algunos de ellos podrían ser: dieta y ejercicio extremo, ayuno, uso de laxantes y vómitos continuos.

Tipos de bulimia nerviosa
Dependiendo de la frecuencia y el método que se utilice para deshacerse de esas calorías, podemos encontrar diferentes tipos:
El DSM-5 clasifica la gravedad según los períodos en los que surge:
- Leve. Entre 1-3 episodios inapropiados a la semana.
- Moderado. Alrededor de 4-7 episodios inapropiados a la semana.
- Grave. Entre 8-13 episodios inapropiados a la semana.
- Extremo. 14 o más episodios inapropiados a la semana.
Por otro lado, según el método pueden ser de tipo purgativo o no purgativo:
- Tipo purgativo: la persona que lo padece utiliza métodos como laxante, recurre al vómito o suplementos para bajar de peso.
- Tipo no purgativo: la persona que lo padece sigue un tipo de conductas que le ayuden a bajar de peso, como ayuno, una dieta extrema o demasiado ejercicio.

Prueba una sesión gratuita con nosotros
Supera los problemas y cuida de tu salud mental con la ayuda profesional de un psicólogo.
Pide citaSíntomas de bulimia nerviosa
Como cualquier TCA, la bulimia nerviosa deja síntomas tanto físicos como psicológicos. Es probable que al principio no se perciban pero con el paso del tiempo van dejando huellas en tu interior.
Síntomas psicológicos
- Alteraciones cognitivas: se trata de pensamientos obsesivos sobre la comida. No sale de tu mente, aunque quieras olvidarlo por un instante, te persigue. Además de presentar un gran desconocimiento de nutrición, tienes creencias irracionales sobre el cuerpo humano, lo que genera que tengas una visión distorsionada del tuyo propio.
- Alteraciones emocionales: el principal, un sentimiento de culpabilidad tras el atracón. Es el más repetido ya que aparece en cada episodio y esto, sumado al malestar y los cambios bruscos de humor, van a generar sentimientos depresivos.
- Alteraciones conductuales – comportamentales: se trata de las situaciones que intentas ocultar, como comer en secreto y rápido para que nadie se entere, ir al baño tras la comida o las relacionadas con tu propio cuerpo como podría ser medir el peso, mucho o nunca, no mostrar tu cuerpo ni a tu familia, etc.
Síntomas físicos
Los síntomas físicos son más fáciles de percibir desde fuera ya que hay cosas que no se pueden ocultar por mucho que quieras. Algunos de los síntomas más comunes son los siguientes:
- Estreñimiento crónico: por el uso de laxantes y métodos que te ayuden a ir al baño a deshacerte de las calorías que has ingerido, es muy probable que surjan problemas intestinales y de retención de líquidos.
- Dilatación gástrica: a consecuencia de los atracones, el ritmo de las comidas se altera y la sensación de hambre va cambiando, es por ello que los dolores de estómago están a la orden del día.
- Problemas menstruales: en la línea de lo anterior, las alteraciones en los ritmos de las comidas pueden generar alteraciones en la menstruación y volviéndose esta irregular.
- Afectación bucodental: dolor de garganta, úlceras en la boca y erosión del esmalte dental producidos por los esfuerzos de la provocación del vómito.
- Riesgos de sobrepeso: una dieta caracterizada por atracones y arrepentimientos puede generar todo lo contrario a lo que estás buscando con la bulimia nerviosa.
- Heridas: muchas veces podemos darnos cuenta de lo que sucede simplemente con ver las manos de la persona ya que los nudillos y las uñas estarán dañados a causa de los vómitos.

Causas y factores de riesgo
No existen causas determinantes que puedan iniciar un TCA, aunque siempre se habla de diferentes opciones, como aspectos biológicos, sociales, psicológicos… Está demostrado que las personas que más sufren este tipo de trastornos son las niñas y mujeres de entre 15 y 30 años y algunos de los factores pueden ser los siguientes:
- Biología. Los antecedentes familiares suelen ser clave en este tipo de situaciones y es que las personas con familiares de primer grado, como padres o hermanos, que han sufrido o sufren un trastorno alimenticio son más propensas a desarrollar uno. También, la situación que existía en la infancia cuenta y cómo te sentías en aquella época puede ser determinante a la hora de querer un cambio radical.
- Problemas psicológicos y emocionales. La depresión, ansiedad y el consumo de sustancias ligadas a los trastornos alimenticios pueden ser causantes de ello. Actualmente las redes sociales no ayudan en este aspecto ya que todo el mundo puede opinar sobre ti y sobre tu cuerpo, lo que genera más ansiedad a la hora de compartir una foto. Ver tu propio cuerpo distorsionado con la realidad afecta directamente al cambio.
- Dieta. Seguir una dieta estricta genera una mayor probabilidad a desarrollar un trastorno alimenticio. Muchas personas sienten que darse atracones y después purgarlos no va a afectar a su dieta porque se están deshaciendo rápidamente de ellos.
Signos que nos advierten de la bulimia nerviosa
Cada persona experimenta la bulimia nerviosa de una forma diferente, pero existen comportamientos comunes que nos pueden advertir de que alguien cercano lo está sufriendo.
- No come a las horas de las comidas o no quiere comer nunca con vosotros.
- Se pesa con frecuencia.
- Siempre está a dieta.
- Hace ejercicio en exceso.
- Toma laxantes a menudo y sin explicación.
- Hace viajes al baño nada más terminar la comida.
- Desaparece gran cantidad de comida de repente.
- Pasa menos tiempo con amigos y familiares.
- Tiene grandes cambios de humor.
Tratamiento
En cuanto al tratamiento de los TCA, lo más utilizado es la terapia cognitivo-conductual. En ella se afirma que las mujeres están sometidas a una presión social a la que deben hacer frente por su tipo de cuerpo. Esta situación afecta a las mujeres con baja autoestima y que presentan debilidad emocional. Los objetivos que presenta la terapia son los siguientes:
- Eliminar o reducir los episodios de atracones y su posterior método purgativo.
- Incrementar el número de alimentos que se ingieren.
- Mejorar las actitudes relacionadas con el trastorno.
- Abordar las áreas problemáticas que puedan causar el trastorno como: preocupación por la imagen corporal, baja autoestima, estilos de afrontar la situación…
- Prevención de recaídas.
- Potenciar la práctica moderada del ejercicio saludable.
Los trastornos alimenticios no son un juego y no debes dejarlos pasar, pide cita con nosotros y te ayudaremos a dejar atrás esos pensamientos intrusivos.
Por qué elegir Siquia
- Somos líderes en atención psicológica online desde 2012.
- Primera cita informativa gratuita.
- Terapia online desde 40 euros la sesión.
- Equipo de psicólogos senior, con décadas de experiencia.
- Toda la terapia que ofrecemos es por videoconferencia. 100% confidencial.
- El mismo psicólogo te atenderá durante todo el tratamiento.
- En Siquia no pierdes el dinero de las sesiones. Si no puedes conectarte o no estás, la sesión pasa a otro día.
- Atención en español, inglés y catalán.
