Son pocos los grandes empresarios que pueden afirmar que estén exentos de polémicas y Elon Musk no es uno de ellos. El magnate, nacido en Sudáfrica, director de empresas como Tesla Motors y cofundador de otras como PayPal, ha sido nombrado como el hombre más rico del mundo por la revista Forbes.
Las luces y las sombras de Elon Musk, el multimillonario con síndrome de Asperger

Día tras día, su fama no hace más que aumentar. Todo en él, desde sus polémicos tuits hasta su ajetreada vida, genera curiosidad. Hasta el nacimiento de su hijo, fruto de su relación con la cantante Grimes, copó los titulares de multitud de medios en todo el mundo, debido al curioso nombre que decidieron ponerle: X Æ A-12.
Guest starring … pic.twitter.com/buM3bTOWbX
— Elon Musk (@elonmusk) May 7, 2021
Sin embargo, nada de esto parece haber convencido a Elon Musk de alejarse del foco mediático. Todo lo contrario, pues recientemente ha participado como maestro de ceremonias del conocido programa de humor Saturday Night Live.
La decisión, algo controvertida por su tendencia hacia las polémicas, provocó un ataque de pánico en Grimes, que le acompañó durante uno de los sketches. «Tuve un ataque de pánico que me llevó al hospital. Sinceramente fue bastante aterrador y supongo que es un buen momento para empezar con la terapia», confesaba la cantante en una publicación de Instagram en la que aparecía posando con Miley Cyrus, otra de las invitadas del programa.
Sin embargo, todo a punta a que el multimillonario disfrutó enormemente de su paso por el conocido programa y hasta se sintió lo suficientemente cómodo como para compartir con el público que tiene síndrome de Asperger.
El síndrome de Asperger: el trastorno que sufre Elon Musk
La Confederación Asperger España, formada por 26 asociaciones de síndrome de Asperger, lo define como «un trastorno del desarrollo que conlleva una alteración neurobiológicamente determinada en el procesamiento de la información». Las personas que lo padecen encuentran dificultades a la hora de relacionarse con personas de su misma edad, aunque también «tienen un aspecto e inteligencia normal».
Aunque forma parte de los Trastornos del Espectro Autista, no debe confundirse con el autismo propiamente dicho. La Confederación Asperger España los diferencia así: «La severidad de las deficiencias en el autismo es mucho mayor que en el síndrome de Asperger y el niño posee a menudo poco o nada de lenguaje. Los problemas en el aprendizaje son más comunes en el autismo clásico. En el síndrome de Asperger siempre está presente el lenguaje formalmente correcto y la inteligencia (capacidad cognoscitiva) es normal e incluso en algún caso puede estar sobre la media.»

El Asperger afecta a las habilidades sociales, a la comunicación, a los intereses, que suelen ser bastante limitados, y a ciertos aspectos del comportamiento, que suele caracterizarse por los «rasgos repetitivos o perseverantes». Además, normalmente conlleva una descoordinación motora que les hace parecer torpes.
En aquellos con síndrome de Asperger son comunes la ansiedad y la depresión, a veces difíciles de diagnosticar debido al «comportamiento social anómalo y el patrón restringido de intereses característicos de la presentación del síndrome de Asperger». Además, es muy común también que las personas con Asperger recurran a un exceso de planificación, fruto de un perfeccionismo extremo.
A Elon Musk el éxito no le ha alejado de estos padecimientos. En una entrevista concedida a The New York Times en 2018 confesaba trabajar 120 horas semanales y afirmaba que «a veces no salía de su empresa durante tres o cuatro días», un hecho que generó bastante preocupación entre amigos y familiares.
Ni su cumpleaños pudo salvarle de la obsesión por el trabajo aquel año, y apenas dejó de trabajar el día de la boda de su hermano, a la que acudió tan solo dos horas antes y de la que se fue inmediatamente después para asistir a reuniones de Tesla.
Prueba una sesión gratis
