kurt cobain suicidioEste año Kurt Cobain cumpliría 53 años y nunca se ha dejado de especular qué le condujo al suicidio y si en realidad no fue asesinado. Gran parte de estas especulaciones y la tendencia a buscar teorías conspirativas surgieron durante las investigaciones de los policías y detectives privados involucrados en su caso. Cuando alguien habla de su final siempre hace repaso a todos los problemas que acompañaron al líder de Nirvana durante gran parte de su vida y al hablar del propio final todos recuerdan la entrevista que dio a Rolling Stone en la que a la pregunta sobre por qué necesita estar armado respondió “Me gustan las pistolas. Disfruto disparándolas”.  

Una infancia compleja y una juventud turbulenta

Sufrió de problemas de salud de diversa índole. Ya de  pequeño le diagnosticaron hiperactividad, motivo por el que fue tratado con metilfenidato; bronquitis crónica y una afección estomacal no identificada que le provocó malestar anímico. Cuando cumplió nueve años tuvo que pasar por el divorcio de sus padres, algo que le avergonzaba. Su madre indicó que ese sentimiento de vergüenza fue inculcado por su padre, aunque su primera pareja, Tracy dijo literalmente que “estaba enfadado con sus padres desde sus años de colegio y tenía mucho miedo a ser herido”. Durante la adolescencia se refugió en la música y en 1987, a los 20 años, se convirtió en uno de los fundadores de Nirvana. Su carrera profesional fue marcada por el rechazo que le generaba la fama, la relación tóxica con la madre de su única hija y la adicción a la heroína.

La cuestión del suicidio en España

La OMS indica que “la depresión y los trastornos por consumo de alcohol, el abuso de sustancias, la violencia, las sensaciones de pérdida y diversos entornos culturales y sociales constituyen importantes factores de riesgo de suicidio”. Para su prevención abogan por políticas públicas. En España no existe un plan de prevención nacional del suicidio, es competencia de las comunidades autónomas, aunque sí hay algunas recomendaciones que sí podemos tomar en caso de tendencias suicidas. Estas son las alertas que nos indican que es hora de acudir a un psiquiatra o consultar con un psicólogo.

  • Se expresan abiertamente y en alto sentencias como «voy a matarme», «prefiero estar muerto» o «ojalá no hubiese nacido»,…
  • El suicida cuenta con elementos a mano que pueden facilitar el acto en sí: ha comprado muchos medicamentos, da vueltas a un escenario de cómo sería su muerte,…
  • Ha dejado de relacionarse con su entorno.
  • Muestra cambios bruscos de humor: pasa de la euforia al llanto o la tristeza profunda en el mismo día.
  • Se siente impotente ante su situación e incapaz de cambiar su presente.
  • Consume alcohol y drogas de manera habitual.
  • Cambia las rutinas de sueño y alimentación de manera aleatoria y de forma brusca.
  • Se muestra imprudente y no le importa.
  • Ha regalado objetos importantes de su vida.
  • Se ha despedido de algunas personas.

La Fundación Española para la Prevención del Suicidio en su web aporta información más detallada. Además, existe un teléfono de la esperanza para quienes se están replanteando el suicidio. Es el 717 00 37 17.