Los perros también sufren ansiedad

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Tras casi un año y medio de pandemia, las relaciones con nuestros perros se han afianzado tanto que pueden llegar a experimentar una fuerte ansiedad cuando les dejamos solos.

El apego generado por los perros hacia sus dueños ha crecido de forma considerable

Ya estamos a mitad del 2021, los contagios han bajado, las muertes también, las vacunan van más rápido y la mascarilla ya no es obligatoria en exteriores. Con ello vuelve la normalidad.

La ansiedad y el agobio que teníamos antes por llevar la mascarilla o mantener la distancia de seguridad ha acabado, aunque hay algunos que lo llevan mejor que otros. En este caso tenemos en cuenta a los animales y es que, en concreto los perros, están empezando a sufrir ansiedad tras la pandemia.

Según datos de la Real Sociedad Canina de España (RSCE), más de la mitad de los perros sufren ansiedad por la vuelta a la normalidad tras el confinamiento debido a la separación de sus dueños.

Durante más de un año, la mayoría de los perros no se han separado de sus respectivos dueños a causa de las fuertes restricciones que había entre provincias y no te dejaban viajar. Sin embargo, este bonito vínculo ha sido tan estrecho durante todo este tiempo que ahora que comienza la normalidad y los dueños recuperan las anteriores rutinas, los perros pueden presentar síntomas de ansiedad al quedarse solos y por consecuencia, pensar que es definitivo.

Si se sienten solos pueden adoptar conductas agresivas para llamar la atención de sus dueños

La RSCE ha afirmado que la relación entre las mascotas y sus dueños ha cambiado de una forma muy drástica ya que se han acostumbrado a estar con ellos e incluso muchos cachorros adoptados durante la cuarentena han crecido con ellos. Han pasado de pasar tiempo solos durante la semana a estar todo el día con ellos.

Esta situación que ha creado mucho apego entre animales y personas ha sido muy satisfactoria, pero ahora trae consecuencias. Con la vuelta a la normalidad, los perros han comenzado a sufrir secuelas al estar más tiempo solos. Los cachorros que nacieron durante el confinamiento son los que peor lo pasan ya que nunca antes habían estado solos. Esto produce alteraciones físicas y emocionales en forma de ansiedad y estrés por la separación.

Según la Sociedad canina, los animales pueden desarrollar algunas rutinas como un aumento de ladridos o adaptarse a unas conductas agresivas y destructivas para llamar la atención de sus dueños ante lo que ellos consideran un abandono.

En cuanto a las secuelas físicas, la pandemia ha servido para dar más paseos con los perros (recordemos que solamente se podía salir al supermercado y a sacar al perro) por lo que estos hacían más deporte. Tras la vuelta a la normalidad, las personas evitan sacarles tanto por lo que hacen que aumente su peso. Los perros más mayores pueden notar una pérdida en la movilidad y una alteración de sus necesidades fisiológicas.

¿Cómo frenar estos casos?

La RSCE aconseja llevar a cabo unos periodos de adaptación en el cambio de las rutinas, de este modo las mascotas se pueden ir acomodando a la nueva situación. Si se puede es mejor ir dejando a nuestra mascota sola cada vez más tiempo de forma paulatina antes que hacer un cambio brusco y dejarle solo un día entero.

Poco a poco se irán acostumbrando y no lo notarán tanto.

  • Salidas escalonadas. Si hay familias de cuatro personas o más, es aconsejable salir de forma escalonada para que los perros no se queden solos del todo e intentar que la mascota vaya con ellos a las actividades que puedan, siempre que salen con sus dueños lo agradecen.  

Por otro lado, si se trata de personas que viven solas, es recomendable avisar a un familiar o un amigo que se pueda quedar con la mascota un rato y así no esté tanto tiempo solo.

  • En el caso de salir con ellos y sus comidas, lo recomendable es espaciarlas poco a poco en un plazo de unos 14 días para poder llegar a la pauta que se va a seguir definitivamente con los horarios de cada familia.

Si el animal empieza a ser más agresivo lo mejor es acudir a un profesional, desde un criador hasta especialistas del comportamiento como etólogos o adiestradores.

Además, la Sociedad Canina está trabajando en el desarrollo de clases y seminarios de tipo práctico para ayudar a los perros y a sus dueños a alcanzar la vuelta a la normalidad con una relación sana como la que había antes.

  • Hay que prestar atención a lo que hace nuestro perro en casa (será fácil, hemos estado tres meses encerrados con él). Fíjate en qué juguetes utiliza, que sonidos le ponen nervioso, etc. Es importante vigilar esos comportamientos.

En realidad, no es complicado saber cuándo un perro sufre de ansiedad. Suele ladrar durante muchos minutos sin parar, pueden hacer sus necesidades hasta después de haberles dado el paseo o rascar el suelo y las puertas con el objetivo de querer salir.

  • Tienes que ser capaz de entretener a tu perro buscándole unos juguetes que le mantengan ocupado cuando le dejes solo. Por ejemplo, hay juguetes en los que se meten un premio (comida especial o algo que le guste) y tienen que intentar sacarlo. Esto les puede llevar horas por lo que estarán entretenidos y no sabrán ni que te has ido, algo imprescindible si queremos salir durante un gran tiempo.

Si estos trucos no te han servido, la última opción es dejarle en una guardería de perros en las que les cuidan y les dejan jugar con otros perros (también estarán entretenidos), contratar a alguien que le pasee (la peor opción ya que luego llegará a casa y estará solo) o dejárselo a un amigo o familiar que pueda cuidarlo y así no estará solo.

La Encuesta nacional de propietarios de mascotas APPA 2017-2018 indica que 85 millones de familias tienen mascotas en casa, y de estas, el 60,2% poseen perros. Nuestras mascotas son parte de nuestra familia ya que siempre están sin importar el qué.

Por ello, es muy importante cuidar su salud del mismo modo que cuidamos la nuestra. Si nosotros acudimos a un especialista cuando presentamos síntomas de ansiedad, ¿por qué ellos no? También tenemos que aprender a ver cuáles son sus necesidades y cómo podemos ayudarles ya que, como se ha demostrado, la ansiedad no solo es cosa de humanos, también de perros.

Imagen de Paula Parra Maté
Sobre Paula Parra Maté Licenciada en Periodismo por la Universidad de Valladolid. Soy alegre y muy risueña, me gusta informarme e informar a los demás, aprender cosas nuevas y dar lo mejor de mí en cualquier ámbito de mi vida. Mi objetivo es llegar a ser alguien importante en el mundo de la comunicación.
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