Macario Fernández es psicólogo de Oviedo y colaborador de Siquia. Especialista en prestación de servicios destinados a mejorar la calidad de vida de personas con dificultades de tipo cognitivo, emocional, conductual y relacional. Destinados tanto a niños y adolescentes, adultos, parejas y familias.  Actualmente desarrolla su trabajo como psicólogo en su gabinete Psingular, que compagina con la impartición de talleres de sensibilización para padres, técnicas de estudio, envejecimiento positivo, dejar de fumar…

Hablamos con él de cómo la psicología ayuda a las personas a sentirse mejor y nos ayuda a desmontar algunos mitos.

«Los problemas más frecuentes que me encuentro en adultos son la ansiedad, el bajo estado de ánimo y los problemas de adaptación a situaciones vitales. En niños y adolescentes son frecuentes los problemas de comportamiento y de rendimiento escolar. A las personas que se encuentren en alguna de estas situaciones anteriores, les podría decir que es normal que a lo largo de nuestra vida haya ciertas situaciones que agotan nuestros recursos y nos superan, a todos nos pasa. Cuando esta situación genera dolor y sufrimiento en nosotros y los que nos rodean, la opción más valiente y saludable es la ayuda profesional», nos comenta.

Macario Fernández ayuda desde la orientación cognitivo-conductual y utiliza frecuentemente recursos propios de la psicoterapia positiva y de la potenciación de fortalezas. «Una primera sesión se emplearía en realizar una evaluación clínica de los problemas de la persona. Comenzaríamos por una explicación detallada del tipo de servicio que se ofrece, seguido de una recogida de datos básicos personales. A continuación se comenzaría a trabajar con el motivo de consulta e identificar los problemas de la persona, su importancia, historia y descripción de los mismos, así como aspectos familiares y de estilo de vida», explica.

¿Cuáles son  los pasos previos al diagnóstico?

La orientación en la que me sitúo trata de evitar las etiquetas diagnósticas en las personas, debido a que considero que los núcleos de intervención son la persona y sus problemas. A modo de sustitución del diagnóstico, se determinan diferentes problemas sobre los que intervenir y las variables asociadas mediante el análisis funcional de los mismos y los datos de la entrevista y los test. Con estos datos, se realiza un mapa explicativo del caso, llamado formulación, que me permite como terapeuta explicar al cliente de forma resumida las causas de sus problemas, qué factores los mantienen y qué posibilidades de intervención existen.

¿Y cómo ayudar a dar al paciente los primeros pasos para pedir ayudar profesional?

Cuando una persona no es consciente de sus problemas, es complejo reducir su resistencia a recibir ayuda. Se trata de un proceso de negociación en el que familia, terapeuta y cliente potencial deben llegar a acuerdos y ceder en ciertos aspectos con la finalidad de que la persona se dé la oportunidad de recibir ayuda. En mi caso, trataría de facilitar que la familia tuviera herramientas para poder hablar aunque sea brevemente con la persona en cuestión, a través de una conversación telefónica, videoconferencia, correo electrónico o consulta. De esta forma se pueden reducir las resistencias y creencias erróneas que pueda tener la persona sobre sus problemas y trabajar la motivación para conseguir su mejoría y colaboración.

¿Cuál es tu experiencia con la psicología online?

De mi experiencia en la terapia online puedo decir que resulta cómoda y económica para muchas personas. Tiene unos efectos similares a la intervención tradicional y resulta menos intrusiva sobre todo para aquellos a los que les resulta incómoda la presencial. Yo ayudo a través de varias opciones. En primer lugar, las videoconferencias son la primera elección en cuanto al apoyo a distancia, debido a que es el método más similar al presencial y por lo tanto el más similar también en cuanto a eficacia. Trabajo con Skype y Google Hangouts, programas fáciles de utilizar y accesibles para cualquier persona con conocimientos básicos de informática. Cuando la persona ya ha tenido sesiones online o presenciales y ha avanzado positivamente en el curso de sus problemas, tiene la opción de realizar los seguimientos a través de correo electrónico o teléfono.

¿Qué pautas le darías a una persona que tiene algún tipo de problema pero no sabe si acudir a un psicólogo le puede ayudar? 

Le diría que al igual que en la salud física existen disciplinas y procedimientos que pueden hacernos mejorar, aliviar el dolor y estar más sanos, para la salud psíquica también existen soluciones eficaces para solucionar problemas cotidianos y mejorar nuestro bienestar. El psicólogo puede ayudar a potenciar sus habilidades y aprender nuevos recursos que ayuden a la persona a vivir de forma plena, feliz consigo mismo y con cómo se relaciona con su entorno y sus seres queridos.