A veces el maltrato psicológico es algo difícil de detectar. Habitualmente podemos darnos cuenta de que alguien sufre maltrato físico porque hay pruebas que lo demuestran, moratones o marcas en el cuerpo de la otra persona.
Maltrato psicológico: ¿Cómo detectarlo y qué hacer para detenerlo?

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Sin embargo, el maltrato psicológico no deja huella a simple vista. Es igual de peligroso que el maltrato físico. Y lo más sangrante es que quien lo sufre, muchas veces, no es consciente de que está siendo maltratada.
Las consecuencias del maltrato psicológico son gravísimas. Destruyen psicológicamente a la víctima y la devastan emocionalmente.
¿Qué es el maltrato psicológico?
Lo más habitual es que, cuando escuchemos maltrato psicológico lo relacionemos con parejas. Sin embargo, se puede dar en distintos casos. De un padre a un hijo o viceversa, entre amigos, etc. Lo que sí es más común es que se de entre dos personas.
Por tanto, lo podemos definir como la conducta destructiva que tiene una persona sobre otra.
Cabe destacar que estas dos personas se encuentran en desigualdad de condiciones ya que se utiliza el abuso de poder para anular a la otra persona. Además de la manipulación y el chantaje emocional. Por eso decimos que la relación entre esas dos personas es desigual o asimétrica.
Hay ocasiones en las que la persona sufre cambios externos que pueden ser detectados. Estos cambios son tristeza, inseguridades o pérdida de peso. Se puede llegar a percibir que la víctima está dejando de ser ella misma.
Es decir, la persona deja de comportarse como siempre, pierde alegría o deja de quedar con su entorno. Pero muchas veces el cambio es tan lento que las personas de su alrededor no llegan a detectarlo. De hecho, la propia persona que está sufriendo maltrato puede llegar a ocultar lo que está pasando por vergüenza.

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Pedir cita¿Cómo se comporta un maltratador?
El objetivo que se pretende conseguir con el maltrato psicológico es aislar a la víctima. La alejan de su entorno, familiares, amigos. Cualquier persona que pueda suponer un apoyo psicológico o refuerzo para ésta.
En casos extremos la víctima puede acabar dejando los estudios o el trabajo. En ocasiones incluso llega a mudarse a otro barrio o ciudad. Para el maltratador, cuanto más lejos este de dichos apoyos mejor para él.
A veces ese aislamiento se consigue de una forma más “oculta”. Las personas que realizan violencia psicológica suelen ser personas manipuladoras. Se muestran ante el entorno de su víctima como personas bondadosas, alegres y empáticas. Así la gente que rodea a la víctima se pensará que es una buena persona.
Su objetivo es posicionarse como el “bueno de la película” para poner a la familia y amigos de la víctima en su contra. Siembra la desconfianza para asegurarse de que así nadie la creerá.
El maltratador va a usar técnicas de dominación y control sobre su víctima. Las va usando de forma progresiva. Esto quiere decir que al principio de la relación estas técnicas son prácticamente insignificantes. De esta forma se mantiene a la víctima confusa. Así consigue que sea más vulnerable a la manipulación.
Para que la persona que sufre el maltrato se muestre desconcertada el maltratador establece una serie de conductas. Entre ellas podemos encontrar las siguientes:
- Hacen insinuaciones que generan inseguridades en la víctima.
- Utilizan un lenguaje sarcástico o irónico para desconcertarla.
- Generan silencios que incomodan a la otra persona.
- Hacen chantaje emocional constante.
- Utilizan la mentira. Mienten con total seguridad y convicción para rebatir cualquier tema.
- Acusan a la víctima contantemente de sus problemas.
- Tienen gestos de desprecio contra ella de manera continua. Le hacen ver que no sirve para nada.
- Hacen comentarios obscenos y descalificativos hacia la otra persona. Además de humillarla en público o en privado.
- Convierten el sexo en una herramienta de recompensa o castigo.
Todas estas actuaciones acaban anulando a la víctima. Esto se debe a que no sabe cuándo ocurrirán y por tanto se encuentra a expensas. Bloqueada por el miedo y la incertidumbre, no hace nada para enfrentarse a su maltratador.
Además de las conductas mencionadas, hay expresiones comunes en las personas que realizan violencia psicológica. “Antes no estabas así de gordo”, “esto no es lo que te había pedido para comer, pero como nunca haces lo que yo quiero”, “no vales para nada”, “das asco”, etc.
La víctima está en un estado de alerta continuo que le genera un estrés constante. Poco a poco se va consumiendo y empieza a descuidarse, preocuparse por su físico e incluso por su higiene. Esto es lo que el maltratador buscaba. Esto puede derivar en trastornos de la alimentación, insomnio, ansiedad e incluso depresión.
¿Cuál es el perfil del maltratador?
- Son intolerantes. No respetan las opiniones, actitudes o comportamientos de los demás. Están llenos de prejuicios. Por eso, suelen reaccionar de forma agresiva o violenta. De ahí su mala educación.
- Parecen encantadores. Al principio se muestran como personas encantadoras y simpáticas. Saben de qué forma actuar para persuadir a su víctima. A medida que avanza la confianza empiezan a mostrar su verdadero “yo”. Una persona destructiva y manipuladora.
- Son autoritarias. Los maltratadores se caracterizan por ser antidemocráticos e intransigentes. En resumen, a su sí, no hay no.
- Son fríos. Tienen pensamientos rígidos y solo creen que hay una verdad, la suya. No buscan dialogar ni entrar en razón porque para ellos la única opinión válida es la suya.
- Son chantajistas. Siempre van a actuar en función de sus intereses y necesidades. Para ello, manipulan e incomodan a la víctima a través del chantaje. Cuando algo no funciona hacen que la otra persona se sienta culpable.
- Tienen cambios de humor. Pasan de un estado agradable al enfado en cuestión de segundos. Es decir, pueden estar siendo personas encantadoras y de repente convertirse en personas horribles.
- Aíslan a la víctima. Es uno de sus principales objetivos. El maltratador busca alejar a la víctima de sus familiares y amigos para convertirla en su sumisa/o.
- Son crueles y mentirosas. No les importa el daño que puedan ocasionar a su víctima porque la empatía no es algo que les caracterice. Van a mentir e inventarse las cosas que hagan falta para obtener sus deseos, independientemente del daño que puedan ocasionar.
¿Qué consecuencias tiene el maltrato psicológico?
La víctima se enfrenta a una falta de apoyo y reconocimiento de su valía casi desde el principio de la relación. A medida que pasa el tiempo y la confianza aumenta a esta falta de adulación se sumarán expresiones de descalificación. Frases acerca de su físico o de su personalidad que terminarán por bloquearla.
Ese bloqueo va a ir generando a su vez una baja autoestima, ansiedad y un estado de alerta constante. En ocasiones esto puede llegar a desarrollar trastornos psíquicos graves como depresión. La víctima llega a una crisis de identidad total porque ha sido anulada. Es tal el efecto del maltratador que la persona llega pensar que de verdad no sirve para nada.
Cuando esto ocurre, es necesario que la víctima acuda a un profesional de la salud mental. En el caso de que esté tan anulada que no consiga ver que está siendo maltratada psicológicamente, tú como familiar o amigo puedes sacarla de ahí.
En terapia se realzará un trabajo basado principalmente en reconstruir poco a poco su personalidad. Es una especie de viaje en el que la víctima va a conseguir reencontrase con ella misma. Con su “yo” verdadero.
En Siquia contamos con una red de psicólogos online. Estos te ofrecerán la ayuda que necesitas a través de distintas sesiones. Con el trabajo del terapeuta conseguirás volver a ser tú mismo. Saldrás de esa jaula donde se te ha alejado de toda tu vida. Si crees que estás en una situación de maltrato psicológico no dudes en contactar con nosotros.
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