José Manuel nos habla del centro y de cómo trabaja con Lucía Martínez, psicóloga especializada en terapia infantil. Ambos tienen una formación cognitivo-conductual y la combinan con técnicas de arteterapia, movimiento expresivo y otras que les permiten tener una visión más global de la persona.
¡Sigue leyendo para conocerlos!
¿A quiénes están orientados vuestros servicios?
Nuestros servicios están orientados tanto a población infantil y adolescente como a adultos y mayores. Aunque mi formación profesional está más orientada a adolescentes, adultos y mayores, Lucía Martínez, mi compañera, está especializada en Terapia Infantil.
¿Cuáles son los problemas más frecuentes con los que os encontráis en vuestros pacientes? ¿Hay alguna pauta común que les podéis dar para orientarlos en su resolución?
En nuestra consulta, acuden personas con demandas muy diversas, aunque con mayor frecuencia aparecen problemas de ansiedad, depresión, estados de ánimo decaídos, problemas de pareja y estrés. El manejo de la ansiedad y el estrés y aprender nuevas estrategias de resolución de conflictos suelen ser fundamentales para el afrontamiento de la problemática que les lleva a consulta.
Del mismo modo, aunque damos pautas concretas y aplicamos diferentes técnicas psicológicas en la terapia, ayudamos a las personas a hacerse cargo de su propia situación y responsabilizarse para así ser ellos mismos los que resuelvan el/los conflicto/s. En cierto modo, el proceso terapéutico implica un crecimiento personal y tratamos que todo lo que se va trabajando en él, le sirva al paciente para más adelante ser capaz por sí mismo de resolver futuros conflictos de manera satisfactoria.
¿Qué tipo de terapia aplicáis? ¿Nos podrías describir cómo es una primera sesión?
Tenemos una orientación integrativa. Ambos tenemos una formación parecida: Cognitivo-Conductual, Gestalt y ahora estamos profundizando en Movimiento Expresivo, Arteterapia y EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por los Movimientos Oculares). Lo que pretendemos es tener una visión más global de la persona, desde diferentes perspectivas que nos permita tener un abordaje más completo y, por tanto, efectivo.
Durante la primera sesión, se mantiene una entrevista con el objeto de conocer a la persona que ha acudido a consulta, el problema que le trae y la demanda específica que tiene. Se trata de tener una visión global e ir conociendo el marco familiar, social y laboral de esa persona para entender los diferentes factores con los que vamos a trabajar durante la terapia. Es un espacio básicamente de escucha en el que permitimos que la persona se exprese y nos cuente en qué momento se encuentra.
En ocasiones, son los propios familiares de los pacientes los primeros que se interesan en la búsqueda del profesional para ayudar a su allegado. ¿Cómo se abordan estas situaciones cuando el paciente no es el convencido de acudir a un terapeuta?
Es importante que el paciente sea el primer interesado en realizar la terapia. Es cierto que no siempre es así. En ocasiones, cuando son los familiares los que acuden a consulta para expresar sus preocupaciones sobre otro miembro de la familia, los invitamos a que cuando regresen a casa les expliquen que se han asesorado y que, sin ningún tipo de compromiso, acuda a nosotros para que nos explique cómo ve y vive la problemática que les trae. Todo esto expresado desde el vínculo afectivo que les une y las ganas que tienen de que esa persona se encuentre mejor, con mayor bienestar. Con estas pautas, suelen acudir a terapia.
Sin embargo, cuando el posicionamiento de la persona es fuerte, se les indica que le expresen su apoyo y que, si en algún momento, muestra su malestar o se queja, aprovechen para sugerirle que acuda a terapia. Aún así, como cada persona es diferente, no hay una pauta concreta. Nos guste o no, si es mayor de edad, esa persona es la que decide si acudir o no a un tratamiento, siempre y cuando no haya riesgo de que ocurra algo que vaya en contra de su propia integridad física y psicológica, con lo cual ya hablamos de temas más extremos, y por tanto, la actuación es diferente.
¿Qué ventajas consideráis que aporta la terapia online al paciente?
Actualmente, y gracias al desarrollo tecnológico que hemos tenido en los últimos 15 ó 20 años, es una herramienta útil ya que nos permite trabajar con personas que, por lejanía geográfica o por problemas de movilidad, necesitan terapia. Es cierto que, evidentemente, el contacto no es el mismo que cuando tienes a la persona delante físicamente, sin embargo aporta esas ventajas que he señalado y que hace que una terapia sea más accesible para una persona.
¿A través de qué métodos asesoráis y atiendéis a los pacientes que están lejos geográficamente?
La atención telefónica siempre ha existido y es cierto que también tenemos experiencia en ese medio. En los últimos años, el correo electrónico, el chat y la videoconferencia, se han ido sumando como vías de trabajo terapéutico. El proceso es prácticamente igual al explicado anteriormente, cuando atendemos en consulta física. Sí es cierto que tenemos que prestar especial atención a lo emocional, ya que, exceptuando la videoconferencia y en menor medida, la atención telefónica, en cualquier medio por escrito, este aspecto se diluye.
Es fácil que los pacientes encuentren en internet y otros medios anuncios y reclamos de personas que ejercen actividades terapéuticas o de coach pero que no son psicólogos ni profesionales. ¿Qué le recomiendas a estos pacientes que no saben a quién acudir? ¿Cómo diferenciar del profesional válido del que no lo es?
Internet está a disposición de todos. Esto significa que, ante todo, una persona que esté buscando ayuda terapéutica, debe informarse e indagar sobre las diferentes personas que ofrecen este tipo de servicio (terapéutico, coach, crecimiento personal, etc.), así como en qué consiste un trabajo terapéutico y de couching, y que un coach no está formado para realizar un trabajo terapéutico ni viceversa.
Por esta razón, en nuestra web (www.psicos-salud.es), y en redes sociales como LinkedIn, Twitter y Facebook, damos información detallada sobre nuestra trayectoria profesional y nuestro ámbito de intervención. Consideramos fundamental el que una persona que acude a nuestra consulta, sepa quiénes somos y cómo trabajamos. Creemos que de esta forma, desde la información y el asesoramiento se puede ir erradicando este tipo de intrusismo laboral.
¿Ofrecéis talleres, charlas, encuentros prácticos con pacientes?
En la actualidad, estamos trabajando en esta línea. Ofrecemos talleres de crecimiento personal y desarrollo de habilidades y es un proyecto que nos ilusiona. La experiencia nos ha señalado esta vía de trabajo como una forma de trabajar con las personas complementaria a las que están realizando terapia y para aquellas otras que desean trabajar diferentes aspectos personales. La retroalimentación que ofrece un grupo es terapéutico de por sí, y queremos aprovechar esta ventaja.
En septiembre, a través de nuestra web, ofreceremos nuevos talleres, así como formar grupos terapéuticos.