
Mindfulness y Psicología: beneficios de su práctica durante la terapia


Mindfulness o Atención plena es un constructo teórico que procede de las tradiciones orientales (especialmente del budismo) y de su reciente adaptación a la cultura y a la ciencia occidentales.
Una de las más conocidas definiciones de “mindfulness” es la de Jon Kabat-Zinn (1994), que afirma que “mindfulness significa prestar atención intencionadamente, en el momento presente y sin juzgar”.
Esta forma de prestar atención a lo que pasa momento a momento sin juzgarlo se puede entrenar mediante la meditación formal y también a través de practicas más informales. La meditación en atención plena es un tipo de meditación, pero no todas las meditaciones son de este tipo.
En las prácticas formales lo que hacemos principalmente es escoger algo como “ancla” al presente (ya sea la respiración, un sonido, una sensación corporal, etc) y le prestamos atención. A partir de ahí observamos lo que surja (ya sean sensaciones, pensamientos, emociones…) sin emitir un juicio sobre ello, dándonos cuenta de que son sucesos impermanentes y dejándolos ir para volver después a anclarnos al presente para continuar el proceso.
De este modo, seremos conscientes de la experiencia, aceptando lo que viene sin reaccionar. Esto nos entrenará para responder a lo que nos suceda en el día a día de una forma más sabia o equilibrada.

Prueba una sesión gratis
La forma más fácil de acudir al psicólogo. Más de 1.400 pacientes confían en el equipo de psicólogos online de Siquia para mejorar su vida.
Pedir cita¿Para qué sirve el entrenamiento en Mindfulness?
Este entrenamiento es clave para regular emociones, algo muy importante para conseguir sentirnos mejor y que en psicoterapia es fundamental, pues la dificultad para regular emociones está presente en muchos trastornos. Además al anclarnos al presente y no meternos en el contenido de nuestra mente que suele vagar por el pasado y el futuro, conseguimos bajar nuestro nivel de estrés, ya que si lo que nos demanda el ambiente es solo lo que existe en ese momento y no la suma de eso y la cantidad de contenidos mentales que creamos (pasado y futuro) nos sentiremos mucho mas capaces para poder solventar cualquier problema que se pueda dar.
Aparte, otra de los puntos a destacar de la Atención plena es el “no juicio”, tanto para las experiencias, lo que nos ayudará a relacionarnos de otro modo con el mundo, sin evitar todo lo que no nos gusta; como para los que sentimos las experiencias, es decir, nosotros mismos. De este modo dejamos la autocrítica y la culpa fuera y nos tratamos de una forma mas amable y compasiva.
Durante los últimos 30 años, se han hecho investigaciones científicas sobre el efecto del mindfulness y se ha encontrado que su práctica mejora la función del sistema inmunológico y puede incluso causar cambios estructurales en el cerebro.
En el campo de la psicología, la atención plena se ha encontrado eficaz en el tratamiento de los síntomas asociados a una amplia variedad de trastornos, incluyendo la depresión, ansiedad, TOC, adicciones, trastornos alimentarios, dolor crónico, trastorno postraumático, y trastorno limite de la personalidad. Además algunos psicoterapeutas como Daniel Siegel (2010) llegan a afirmar que “la práctica de la atención plena puede considerarse el entrenamiento básico para la mente de cualquier terapeuta”, ya que le permite estar en sintonía con el paciente y desde luego hay que practicarlo personalmente si se quiere aplicar en la clínica con los pacientes.
De hecho muchos terapeutas comienzan a aplicarlo a sus pacientes al ver los resultados en su práctica diaria, ya que es beneficioso para cualquier persona, sufra algún trastorno o no.
Pedir cita
