
Paciente de 17 años a quien llevo meses intentando quitar la adicción por los eGames y casi lo consigo. Y digo casi porque un buen día se presenta en la consulta sin soltar el móvil. De hecho, ya entra con la mirada puesta en la pantalla y sin saludar. Dentro de la consulta sabe que una de las normas es “nada de móviles” pero me asegura que “lo necesito, por si acaso”. Me preocupo “¿pasa algo en casa?”. No, no pasa nada, el motivo de su preocupación es otra y tiene nombre: Pokemon.
Pokemon Go se lanzó el pasado 6 de Julio y se ha constituido como un fenómeno mundial, protagonista de redes sociales y medios de comunicación. Y un fructífero negocio en forma de aplicación más descargada, en este momento.
Es un juego de realidad aumentada de manera que los jugadores deben atrapar pokemon que van apareciendo por su camino, con los consiguientes riesgos: pasar una calle sin mirar el semáforo, caminar distraído, falta de concentración,…
¿Qué opinan los expertos?
La psicóloga Marlyn Wei de la Universidad de Harvard dijo en Psychology Today que existen tanto ventajas como inconvenientes de esta moda. Reconoce que funciona como una terapia cognitiva-conductual que produce recompensas asociadas a cambios positivos en el estado de ánimo. Su conclusión principal es que lo más importante es el uso que se hace de esta aplicación por cada uno de los jugadores lo cual depende de los propios intereses o aficiones pero, también, de la afinidad que se tenga con la vida familiar que es lo que acaba determinando la influencia del Pokemon en la vida diaria.
Según la revista Mental Health and Physical Activity, el juego hace caminar mucho para conseguir el máximo número de Pokemon posible lo cual tiene un efecto clínicamente significativo sobre los síntomas de la depresión pero también en otras cuestiones de salud como la obesidad.
En este orden de cosas, John Grohol, psicólogo y creador de PsychCentral, muestra la existencia de numerosas investigaciones que nos señalan que el ejercicio moderado y regular mejora el estado de ánimo. Especialmente de aquellas personas que, de lo contrario, no saldrían a la calle. Sin embargo, asegura “que es un buen complemento de otros tipos de tratamiento como la psicoterapia y la medicación, pero no debería ser el único tratamiento que una persona utilice para tratar de ayudar a su estado de ánimo deprimido”.
Por su parte, Alan S.Hilibrand, portavoz de la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos dice “nos encantan estos juegos que estimulan el ejercicio. Pero también queremos que todo el mundo esté alerta a su entorno mientras disfruta de esta actividad. Caminar mirando al teléfono puede provocar esguinces, fracturas y otras heridas serias».

Según el psicólogo Richard Freed se debería mantener la cautela ya que considera que, en realidad, la pokemanía no ha hecho más que empezar y centra sus preocupaciones en la infancia, afirmando “no estoy seguro de que llevar un videojuego al entorno natural sea la respuesta a largo plazo para que nuestros hijos se vuelvan menos sedentarios. Pronto podríamos conseguir niños en el sofá, cuando se cansen del juego. Incluso podríamos tener aún más problemas para motivarlos a hacer ejercicio si no es con un juego de video”. Asimismo, Freed considera que debería tenerse más en cuenta el riesgo de adicción en la infancia “creo que si se extiende el mundo del juego al mundo real, habrá más niños en riesgo de adicción”. Parte de las investigaciones que ha realizado este psicólogo acerca de los trastornos causados por el uso abusivo de las TIC los ha reunido en el libro “Wired Child: Reclaiming Childhood in a Digital Age”.
Acerca de la posibilidad de que Pokemon Go sea un exergame, un estudio realizado en el año 2013 en la Universidad de Australia Occidental y estudiaron los efectos de hacer ejercicio físico de esta manera. “Nuestra investigación apoya la idea creciente de que la actividad de alta intensidad es buena para los niños y plantea la posibilidad de incluir exergames intensos en las recomendaciones para mejorar la salud en los niños”, según la doctora Louise Naylor, autora principal de la investigación.
Sin embargo, en Mayo de 2013 se dio a conocer otra investigación realizada por la Universidad de Londres en la cual fueron evaluados la actividad física, las habilidades motoras y la salud física en niños que practicaban exergames, concluyendo que no hay pruebas específicas para recomendarlos como intervenciones de salud eficaces en distintos contextos.
El caso de Pokémon Go sería diferente, pues incluye, también actividades reales al aire libre, otro factor que aportaría al bienestar de los jugadores.
¿Cazar Pokemon tiene efectos positivos?
Sí los tiene. ¿Dispuestos? ¡Vamos!
- Es útil contra la depresión y la ansiedad. La estructura del juego es alcanzar metas, retos y niveles que se deben ascender, lo cual sirve para mantener el interés y la concentración. Además, al establecer objetivos para poder llegar a las metas potencia la efectividad, mejora la motivación, siendo todo ello muy útil para una persona con depresión y ansiedad.
- Es útil para personas con problemas en las habilidades sociales. Los jugadores saben que comparten el mismo objetivo con otros jugadores que llenan calles, parques, espacios públicos,…Esto les predispone a crear nuevas relaciones entre ellos y, por tanto, a socializar a través del pretexto Pokemon.
- No tiene en cuenta la presión social. Al contrario que en otros juegos donde el individuo es percibido de una determinada manera, Pokemon Go permite la creación de un espacio virtual propio a sus jugadores en que se les permite expresar todo tipo de sentimientos, incluso, los negativos.
- Es una manera de hacer ejercicio físico. La Pokemanía obliga a hacer largas caminatas para capturar cuantos más Pokemon, mejor. El realizar ejercicio físico está relacionado con un sentimiento de bienestar general y de satisfacción. Los beneficios del ejercicio físico regular son muchos más: ayuda a quemar calorías, es un complemento para las personas que intenten bajar o mantenerse en su peso, reduce el riesgo de enfermedades cardio y cerebrovasculares así como de la diabetes tipo II y disminuye los dolores causados por osteoporosis y artritis.
- Buena herramienta para los pacientes con agorafobia. Al tener que caminar para capturar los Pokemon, se socializa con otras personas pero, como es obvio, se debe salir de casa. Sería una buena herramienta para los pacientes con agorafobia
- Posible mejora en la imaginación. La mezcla entre realidad y fantasía mejora la capacidad creativa de la persona y, de alguna manera, nos devuelve al niño que fuimos.
¿Tiene Pokemon Go alguna consecuencia negativa?
- Dependencia del teléfono. El juego nos invita a buscar Pokemon en espacios abiertos. Es el jugador, en solitario, el que debe ir avanzando con la mirada puesta en la pantalla del móvil, sin levantarla, y con la consecuente posibilidad de accidentes. Si antes eran las redes sociales y las aplicaciones de mensajería, ahora Pokemon nos tiene enganchados –más aún- a la pantalla.
- Aumenta la distracción. Caminar por la calle con la mirada puesta en la pantalla del móvil no es, desde luego, una magnífica idea porque el campo de atención se limita a dicha pantalla y obvia todo lo que está a su alrededor. Todo ello, con el consiguiente riesgo de caídas y accidentes.
- Aumenta el nivel de estrés. En estas circunstancias mencionadas, tienes como objetivo atrapar un Pokemon, el cuerpo se pone en estado de alerta y produce que los niveles de adrenalina aumenten y, por tanto, también el ritmo cardíaco. Con ello, la fatiga percibida debida al modo represivo de afrontamiento del estrés. Esto ocurre si juegas de forma obsesiva.
- En lugar de socializar lo que haces, realmente, es convivir menos con los otros. A medida que vas aumentando el tiempo de juego vas reduciendo, también, tu tiempo de ocio dedicado a otras cosas entre las cuales se halla la socialización. Aumenta el aislamiento dado que el jugador caza Pokemon en solitario.
- De ninguna manera, es un sustituto de un tratamiento psicólogico. Pokemon Go puede ser un buen motivador, proporciona hábitos saludables y de autocuidado positivo y tiene utilidad en salud mental pero, bajo ningún concepto, sustituye un tratamiento profesional realizado por un psicólogo.
Cómo evitar caer en la adicción a Pokemon Go
- Aunque el juego está en la pantalla del móvil nunca olvides que estás en un mundo real. Levanta la mirada de la pantalla y vigila tu entorno, mira dónde estás ubicado y estate atento a lo que ocurre en la calle.
- Utiliza tu sentido común. Piensa que si conduces o vas en bici o moto sin levantar la mirada de la pantalla, te pones en riesgo y pones en riesgo la vida de otras personas. Respétate y respeta a los demás.
- Cuidado con usar la aplicación por calles que se conocen como peligrosas o en avanzadas horas de la noche. Piensa que tu seguridad es lo primero.
- Si tienes hijos pequeños, establece reglas sobre la forma cómo jugar a Pokemon Go. Hará que tanto su salud como su seguridad estén protegidas. Especifica a tus hijos si pueden jugar en cualquier sitio o sólo en determinados sitios y bajo tu supervisión.