¿Qué es la ansiedad social y cuáles son sus síntomas?

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Es posible que te sientas poco cómodo e inseguro en situaciones tan cotidianas como acudir a clase, al cine, o a un lugar donde hay mucha gente, sobre todo el lugares donde puedan ser el centro de todas las miradas. Esto tiene un nombre, se trata de ansiedad social.

¿Qué es el trastorno de ansiedad social?

La ansiedad social es un trastorno por el cual a una persona le genera mucho nerviosismo y estrés las situaciones y lugares con un gran número de gente. Se sienten incómodas, inseguras, nerviosas, sobre todo en lugares donde puedan llamar la atención de algún modo, como en el instituto.

Existen situaciones en las que las personas nos ponemos nerviosos como una entrevista de trabajo, o una primera cita, pero eso es algo momentáneo. Las personas con fobia social tienden a sentir esa ansiedad de manera continuada, durante un largo periodo de tiempo, en este caso si puede ser calificado y diagnosticado, siempre por un profesional, como ansiedad social.

Este trastorno puede ser diagnosticado tanto en adultos como en jóvenes, de hecho es más común que esto suceda en al infancia ante situaciones que nos hayan creado inseguridades y no hayamos superado, por lo que crea esa desconfianza y falta de autoestima en nosotros mismos.

Ansiedad social

¿Qué lo causa?

El trastorno de ansiedad puede ser causado, como hemos dicho, por situaciones vividas que te hayan hecho sentir vergüenza o ridículo, sobre todo durante la infancia, un periodo en el que nos estamos creando como personas y no tenemos la fortaleza mental para superar y saber gestionar estas situaciones.

Este hecho y los sentimientos que hemos experimentado han sido negativos y ha hecho que nos creen inseguridades que si no tratamos a tiempo, pueden prolongarse en el tiempo e irse alimentando. Por tanto, si por ejemplo un grupo de niños se han reído de que te has equivocado o has hecho mal algo, eso hará que te cree una inseguridad y evites volver a responder en clase por temor o miedo a que vuelva a pasar.

Este tipo de experiencias pueden resultar muy traumáticas para niños y niñas, también se pueden crear o reforzar en la adolescencia, un periodo por el que pasamos por una inestabilidad emocional y crisis de identidad que nos hace más vulnerables.

También, aunque no es seguro, puede que intervenga en factor genético, por el momento no hay evidencias claras. También los investigadores están realizando estudios sobre otros factores que puedan intervenir en la creación de la ansiedad social, como el estrés.

Síntomas

Las personas que padecen de ansiedad social presentan síntomas claros ante situaciones en las que se muestran incómodos y nerviosos, pueden ser tanto psicológicos (sensaciones o miedos que puedan tener) o físicos:

  • Enrojecimiento
  • Miedo ante situaciones en las que podrían juzgarte
  • Temor a ser avergonzado en público
  • Nerviosismo al hablar con una persona
  • Miedo a hablar en público
  • Sudores ante situaciones en las que te prestan atención (hablar en público)
  • Temblor de la voz y del propio cuerpo
  • Latidos del corazón muy rápidos
  • Tartamudeo
  • Mareos
  • Visión negativa
  • Falta de confianza
  • Intentar evitar situaciones en las que tu mismo seas el centro de atención

Puede que en ocasiones, este miedo que te provoca socializar te lleve a puntos tan oscuros como emplear sustancias como el alcohol para poder reducir tus nervios y hablar con soltura o sin vergüenza. Antes de que llegues a este punto, debes ser consciente de la situación y evitarlo, anticípate y decide no hacerlo, o mejor, pide ayuda.

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¿Qué puedo hacer?

Ante estas situaciones, lo mejor es que pidas ayuda a un profesional de la psicología. Acudir a terapia será la manera más eficaz para poder afrontar y superar tus miedos.

En las sesiones de terapia el psicólogo deberá identificar la causa de tu ansiedad social, que puede ser un acontecimiento concreto que te haya creado una inseguridad, y empezar a trabajar desde ahí. Es importante que te muestres libre y seguro en todo momento de expresar tus sentimientos, el psicólogo no está ahí para juzgarte, sino para ayudarte.

A partir de ahí empezaréis a trabajar sobre tus emociones, identificarlas, aceptarlas y aprender a gestionarlas, de manera que puedas sanar viejas heridas y puedas anticiparte ante futuras situaciones que puedan generarte malas emociones. También será importante trabajar la confianza y el amor propio, el primer paso para sentirse seguro es conocerse bien a uno mismo, priorizarte cuando sea necesario y no descuidarte. Pensar en ti no te hace egoísta.

Otro factor muy importante en la terapia será la mejora de las conductas antes situaciones que te hacen sentir incómodo, el psicólogo te pedirá que poco a poco te pongas a prueba tratando de superar, pasito a pasito y a tu ritmo, esos miedos. Así como, trabajar en mejorar la comunicación con otras personas, la manera de comunicarte, etc.

Si en algún momento sientes esos nervios porque te toca hablar en grupo o te sientes con valentía para poder acudir a algún evento social, aunque sea pequeño, el psicólogo podrá darte ciertas técnicas para clamar esos nervios (ejercicios de respiración…).

En Siquia contamos con un gran equipo de psicólogas que pueden ayudarte, más de 1600 personas ya han contactado con nosotros. La terapia online es una modalidad que llevamos utilizando con éxito 10 años, llama y concierta tu cita para una sesión de terapia online, la primera sesión informativa es gratuita.

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    Imagen de Lucía Pérez Leonés
    Sobre Lucía Pérez Leonés Lucía Pérez Leonés es periodista, ha querido dedicar su tiempo a escribir sobre psicología, un tema que debería tener más espacio en la sociedad. Cree que la mente es la mejor amiga o enemiga de una persona y hay que cuidarla como es debido. Entre sus hobbies están el motociclismo, la lectura y la música.

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