
Salud mental y física durante las vacaciones: hora de descansar


¡Todo el mundo necesita unas vacaciones al menos una vez al año! Aunque no es el mismo estrés laboral el que un director puede padecer dependiendo del tipo de empleo, todos sufrimos niveles de estrés de los que únicamente conseguimos salir con un periodo alejados de todo aquello que nos altera.
Son muchos los tipos de estrés que se experimentan: podemos hacer frente a la carga de cumplir con plazos ajustados, la toma de decisiones cruciales, o llevar a cabo al mismo tiempo todas las demandas domésticas.
Los estragos del estrés
El problema aparece cuando este estrés se vuelve crónico y se acaba reflejando también en nuestro cuerpo: en la disminución del mismo de soportar o superar las infecciones e incluso la capacidad para evitar lesiones. Cuando una persona está estresada y cansada, es más propensa a sufrir el síndrome de burnout, a enfermarse e incluso su sueño se ve alterado.
Además, en el plano mental no sólo te vuelves más irritable, deprimido y ansioso, también es más difícil enfrentarse a la toma de decisiones importante. En conclusión, el carácter se vuelve más áspero, aislado y deprimido.
Se mire por donde se mire, el estrés no es positivo. Incluso las personas que dicen amar el estilo de vida de alta presión admitirán, en sus momentos más tranquilos, sólo quieren alejarse de todo, aunque sólo sea por un corto tiempo.
Por ello, las vacaciones tienen el potencial para entrar en el ciclo de estrés. Después de pasar unas vacaciones de verano, te sentirás listo para comerte en el mundo de nuevo. Ganamos perspectiva sobre nuestros problemas, llegas a relajarte con nuestras familias y amigos, y se obtiene un descanso de las rutinas habituales.

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Pedir citaLas vacaciones según la psicología
En un estudio de 2009, los investigadores canadienses Joudrey y Wallace apoyaban el hecho de que se tomasen momentos de ocio ya que las vacaciones y el descanso ayudan a amortiguar o mitigar el estrés en el trabajo en una muestra de casi 900 abogados.
Los beneficios de las vacaciones se extienden a las relaciones familiares. Un grupo internacional de investigadores dirigido por la Universidad de Purdue Xinran Lehto concluyó que las vacaciones familiares contribuyen positivamente a la vinculación de la familia, la comunicación y la solidaridad. Se consiguen crear recuerdos familiares compartidos y el tiempo que pasan juntos aislados de las actividades cotidianas ayudan a generar nuevos vínculos positivos.
He aquí algunas maneras de asegurarte de que no padecerás estrés durante tus vacaciones:
- Planea con anticipación. Planear con anticipación también minimizará el estrés familiar, sobre todo durante las mismas vacaciones, sobre todo si se escoge la modalidad todo incluido.
- Conocer las normas y reglamentos. Conocer las normas de seguridad del país al que se viaja o de la aerolínea con la que se viaja te ahorrará algún que otro disgusto de última hora.
- No te sientas culpable porque te vas de vacaciones. Uno de los puntos más importantes de las vacaciones es librarse de tanta culpa como sea posible. Si estás tan angustiado acerca de tomar un viaje, tal vez hay algo más que te detiene. Alternativamente, usted puede decidir donar un poco de su presupuesto inicialmente destinado a circular a una causa benéfica.
- Haz de tus vacaciones una verdadera aventura.
Tal como indica la investigación, unas vacaciones implican nuevos desafíos que te resultarán beneficiosos. Te invitamos a que vayas más allá de tu hotel o resort y explores el lugar del viaje al que has llegado.
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